Dicen que Moisés amenazó al creador con que le quitase de las escrituras si este finalmente acabase con la humanidad. Literalmente le dijo algo así como, “si nos exterminas, a mí quítame de ese libro, he estado haciendo el idiota todo el tiempo”.
Siento decepcionarte, mi querido fatalista, el mundo nunca se va a acabar y no tendrás a qué echar la culpa de tu conformismo. Tendrás que seguir yendo al trabajo que no te gusta hasta que decidas dejarlo, tendrás que ir a hacer la compra, te comerás atascos. Todo seguirá igual.
Por que si Putin esto, porque si Putin lo otro, porque Bill Gates…déjate de rollos. Mientras sigamos culpando a otros seguiremos en el mismo punto, en punto muerto, en stand by, en el limbo. Y La vita è breve, ¿capisce o no capisce?
Pero “José Luís esa es la realidad, la gente está muriendo”. También nacen miles de niños cada día. Pero “las noticias, ¿qué? ¿se las inventan?” La realidad no es esa, hay mucha luz en el mundo, tantísima, de hecho, y cada vez más radiante, que intentan apagarla a diario con un incesante drama ya ridículo.
Pero te digo un secreto, ya han perdido la batalla, el ser humano está recuperando su trono, se acerca la edad más dorada de la humanidad. Y tú y yo vamos a vivirla. Estamos a las puertas de la tierra prometida.
Todo esto que tienen montado, desde tu habitación al infinito del cosmos, es para ti, tu propio Show de Truman. ¿Por qué si no iban a humillarse por conseguir tu voto, tu share de audiencia, conseguir visitas en sus videoclips…? ¿No ves como quieren tener el control sobre ti a través de infinidad de triquiñuelas? Te preguntarás, ¿Tan importante soy?¿todo eso lo hacen por mi? Si. El destino de la humanidad reside en ti. Eres un dios en la tierra que olvidó su auténtica naturaleza y se mezcló con animales.
Hubo un tiempo hace miles de años que el ser humano podía medirse con el mismo creador, su poder y su sabiduría superaban a los cerebros más ilustres de la historia.
Podría decirse que canjean nuestro miedo, que construyen una realidad en la que nosotros perdemos y ellos ganan. Pero ¿sabes qué? En realidad nunca hubo nadie sobre nosotros, siempre fue una ilusión. Creímos que debía haber dioses y reyes, fanáticos, emperadores, mártires. Siempre los hubo porque creímos que debíamos seguirles y no crear nuestro propio camino. Hicieron su función hasta hoy, y sin ellos no sabríamos de nuestra voluntad y lo que somos capaces.
Un nuevo hombre ocupa ya este mundo, una nueva mujer brota de las entrañas de la tierra, pronto serán uno, se reestablecerá el templo, volverán los tiempos del los primeros habitantes, seremos uno con los animales y estos no huirán más de nosotros, seremos uno con el mar, el bosque, el desierto, cada metro de la tierra será Nepal, no existirá la envidia porque no faltará deseo que no se cumpla, nadie levantará su mano contra otro porque no habrá infelices, se acabaron las mentiras.
Mil años de paraíso frente a nosotros. Está escrito. Y si no, lo escribiremos, quieran o no los cielos.
Jose Luis Garcia, 9 de marzo de 2022.
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