Esto lo has escrito tú, sin saberlo.

Me contabas cómo te sentías, abrías tu pecho sin miedo y las palabras empezaban a enlazarse en un borrador. Por primera vez en nuestras vidas podíamos vernos, hasta ese momento ninguno se atrevió a conocer al otro.

Primero hablamos de la infancia, nos contamos cómo era ver el mundo sin decir una palabra, el primer llanto, cuando jugábamos y caíamos en la cama agotados y creíamos en fantasmas. Tú me describías esa canción que oíste tararear a mamá aquel día de otoño desde la placenta. Yo te hablé de mis celos cuando nació mi hermano, tú, que lo cuidase. ¿Recuerdas cómo nos reímos de los mayores y sus problemas?

Me pediste consejo cuando tu primer amor, yo te hablé de aquella chica ciega, de Leonardo. Tú me diste tu amistad en infinitas formas, yo te guardé hondo. Tú me dijiste no tengas miedo, yo, que siempre me tendrás.

Hoy quiero hablarte y tú estás ahí, no dejes que te apaguen José Luís.

Gracias.

José Luís, a 4 de mayo de 2022

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1 comentario

  1. Real como la vida misma 😊

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